El número confirmado de garitos Kirguistán es un hecho en una pequeña duda. Como los datos de esta nación, en la sección interior muy remotas de Asia Central, puede ser ardua para recibir, tal vez no sea demasiado extraño. Independientemente de si hay dos o tres casinos autorizados es el elemento en cuestión, tal vez no es realmente el más importante todos los bits de datos que no tenemos.
Lo que sin duda será la correcta, ya que es de muchos de los estados ex-URSS, y absolutamente precisa de los de Asia, es que no hay ninguna duda será un buen muchos más no se les permite y los casinos de puerta trasera. El cambio de las apuestas no autorizados dinamizar todas las casas de juego ilegales que venir de la oscuridad a la luz. Por lo tanto, las disputas sobre el total de los casinos de Kirguistán es un menor de edad, en el mejor: los cuántos aprobado es el tema que estamos tratando de resolver aquí.
Somos conscientes de que en Bishkek, capital de la metrópoli, está el Casino de Las Vegas (un título maravillosamente único, ¿no crees?), Que tiene juegos de mesa y juegos de máquinas tragamonedas. Tenemos, además, puede encontrar tanto en el Casino de Bishkek y el Casino de Xanadu. El par de ellas ofrecen 26 plazas de vídeo y 11 juegos de mesa, separados entre la ruleta, de veintiún años, y el póquer. Habida cuenta de la semejanza asombrosa en el tamaño y el diseño de estos 2 casinos en Kirguistán, que puede ser aún más sorprendente para determinar que ambos comparten una dirección. Esto parece más sorprendente, por lo que claramente se puede afirmar que el número de casinos de Kirguistán, por lo menos los sancionados, termina en dos miembros, 1 de ellos de haber cambiado su título hace un rato.
El país, en común con la práctica totalidad de la ex-Unión Soviética, ha sufrido algo de una rápida adaptación al sistema de libre empresa. El Oriente Wild, se podría decir, para referirse a las circunstancias caóticas del Salvaje Oeste de un siglo y medio atrás.
Salas de juego de Kirguistán, de hecho, merecen la pena, por tanto, como una pieza de la investigación social, para ver el dinero que se jugó como un tipo de una comunidad la sobrepuja, el consumo conspicuo que Thorstein Veblen habló en el siglo 19 nos a.